Los juegos basados en películas son un clásico de la industria, y la poca calidad general de ellos uno de los chascarrillos habituales de los más aficionados al videojuego. En los últimos años ha habido una serie de buenos juegos de licencias cinematográficas, pero recientemente ha surgido una nueva tónica: La de hacer videojuegos basados en grandes películas del pasado; clásicos como El Padrino o películas genuinamente de culto como la que hoy nos ocupa, Reservoir Dogs, la primera película de Quentin Tarantino. 
SCi se hizo hace años con la licencia, y ahora publicará este mes de septiembre el juego bajo la marca Eidos. Desarrollado por el estudio Volatile, Reservoir Dogs es un juego de acción clásico, sin intentar hacer un clon de GTA como es tan habitual últimamente y en cierto modo encajaría con el argumento de la película. El videojuego, además, sigue fiel y linealmente la historia de ésta, pero profundiza en ciertos detalles de cada uno de los personajes y ata algunos cabos que quedaron sueltos al término de ésta, algo que agradará a los fans, que sorprendentemente no han reaccionado muy bien ante el anuncio de este nuevo juego.
Como decíamos, el juego seguirá la historia de la película, representando las situaciones clave de
l film en las partes jugables, y las escenas memorables a base de secuencias CG que intentar capturar la esencia de la película. El juego no usa imágenes directamente de la película, pero las secuencias cinemáticas con las que cuenta usan las mismas líneas de diálogo, y los mismos ángulos de cámara, con el objetivo de que parezca que estamos viendo la película generada con gráficos 3D. En ese sentido, uno de los actores más emblemáticos del filme, habitual colaborador de Tarantino, dejará su voz y su aspecto físico para la película. No es otro que Michael Madsen, Señor Rubio. La banda sonora de la película también estará, al completo.
l film en las partes jugables, y las escenas memorables a base de secuencias CG que intentar capturar la esencia de la película. El juego no usa imágenes directamente de la película, pero las secuencias cinemáticas con las que cuenta usan las mismas líneas de diálogo, y los mismos ángulos de cámara, con el objetivo de que parezca que estamos viendo la película generada con gráficos 3D. En ese sentido, uno de los actores más emblemáticos del filme, habitual colaborador de Tarantino, dejará su voz y su aspecto físico para la película. No es otro que Michael Madsen, Señor Rubio. La banda sonora de la película también estará, al completo.
Como todo buen juego de gangsters, Reservoir Dogs está dividido en dos partes, una de acción clásica, en tercera persona, centrándose sobre todo en los tiroteos, y otra de conducción, al estilo Driver. Las primeras misiones serán diez, y las otras media docena. Las misiones de acción en primera persona dejarán al jugador una gran libertad, no de movimiento –evidentemente los niveles están limitados-, pero sí a la hora de actuar. En Reservoir Dogs tendremos la libertad de ser unos ladrones profesionales, usando la intimidación y el uso de rehenes, y ser unos psicópatas, matando sin ton ni son. De los dos modos podremos terminar las misiones, aunque el juego evaluará nuestro estilo y nos calificará con un grado mayor o menor dentro de esas tendencias profesionales o psicóticas.
Aparte de un sistema de apuntado que nos permita solucionar las situaciones complicadas como uno psicópatas de tomo y lomo, el juego tiene un complejo sistema de uso de rehenes. Cualquier personaje del juego puede ser proclive a convertirse en nuestro rehén y, acompañados de un indefenso ser humano al que encañonamos con nuestra pistola, podremos usarlos como escudo humano para evitar que nos disparen –o evitar ser dañados si nos disparan-, o presionar a otros personajes para que hagan lo que nosotros queramos.
Aparte de un sistema de apuntado que nos permita solucionar las situaciones complicadas como uno psicópatas de tomo y lomo, el juego tiene un complejo sistema de uso de rehenes. Cualquier personaje del juego puede ser proclive a convertirse en nuestro rehén y, acompañados de un indefenso ser humano al que encañonamos con nuestra pistola, podremos usarlos como escudo humano para evitar que nos disparen –o evitar ser dañados si nos disparan-, o presionar a otros personajes para que hagan lo que nosotros queramos. Los policías quizás sean un poco reacios a hacerlo, así que podremos golpear al rehén para convencerlos. Además, a otros rehenes podremos darles órdenes específicas, como por ejemplo los dependientes de las tiendas.
Además de las misiones a pie, hay también un buen número de misiones de conducción, donde
tendremos que llegar del punto A al punto B, y en ocasiones estaremos acompañados de otros personajes que dispararán a los coches que nos persiguen. Estas misiones son un tanto estándar dentro de los juegos de conducción y acción en general, y además muchas de ellas no tratan directamente escenas de la película, sino que muestran sucesos a los que se hace referencia pero no salen en el film, como por ejemplo por qué Sr. Azul nunca vuelve al almacén.
Una de las claves del juego será ver cómo logran integrar dentro de la acción esa libertad de movimiento y de “estilo de hacer las cosas” sin hacer al juego monótono o previsible, y sin salirse de la estructura de niveles lineales que siguen la trayectoria de la película. En cualquier caso, los fans quizás agradezcan que los cabos sueltos del argumento se aten, y de hecho sean ellos los que, disparando y conduciendo, los aten.
Además de las misiones a pie, hay también un buen número de misiones de conducción, donde
tendremos que llegar del punto A al punto B, y en ocasiones estaremos acompañados de otros personajes que dispararán a los coches que nos persiguen. Estas misiones son un tanto estándar dentro de los juegos de conducción y acción en general, y además muchas de ellas no tratan directamente escenas de la película, sino que muestran sucesos a los que se hace referencia pero no salen en el film, como por ejemplo por qué Sr. Azul nunca vuelve al almacén.Una de las claves del juego será ver cómo logran integrar dentro de la acción esa libertad de movimiento y de “estilo de hacer las cosas” sin hacer al juego monótono o previsible, y sin salirse de la estructura de niveles lineales que siguen la trayectoria de la película. En cualquier caso, los fans quizás agradezcan que los cabos sueltos del argumento se aten, y de hecho sean ellos los que, disparando y conduciendo, los aten.
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